CRÓNICA DE LA ASAMBLEA DE LA HERMANDAD



 
Siguiendo el horario previsto, y con arreglo al Orden del día establecido, se ha celebrado la proyectada Asamblea de la Hermandad del Calvario, de Mérida.
Con una Casa de Hermandad totalmente remozada y realmente digna de acoger esta Asamblea que pasará a la historia de la Cofradía por derecho propio -ha sido la primera que se celebra en varios años-, iniciamos nuestro encuentro con la Oración al Cristo del Calvario: –“En esta tarde, Cristo del Calvario”-
Se dio lectura a continuación al Informe de la Comisión Gestora, el cual, tras hacer un recorrido por los acontecimientos de la Hermandad en el último año, termina con un canto a la fraternidad y a la misericordia, vividas en el seno de la Iglesia: Queremos construir una Hermandad de brazos abiertos para todos, donde cada hermano sienta las tareas de la Cofradía y de la Iglesia como propias.
Recordemos, como resumen de este informe, un párrafo que centra nuestra esencia: “No podemos olvidar que ser miembro de una Hermandad es formar parte de una Asociación pública de la Iglesia, que hace presente a la Iglesia con todas sus actuaciones, de modo especial, cuando pone en la calle a sus sagrados titulares.
Por lo mismo, no olvidemos aquello que es esencial a la Hermandad: es un grupo de Iglesia, representa a la Iglesia y hace presente a Jesucristo”.
Si eso lo tenemos claro, haremos realidad aquello para lo que nacimos: ser testigos del amor de Dios y de la fraternidad.
A continuación escuchamos el Informe de Tesorería, que recibió la aprobación unánime de los asistentes. Luz y taquígrafos en este campo y en todos; esa ha de ser nuestra consigna.
Fue presentado el Presupuesto para el próximo ejercicio de 2.013, a la vez que se comunicaron a los presentes los Proyectos de futuro que tienen la Comisión Gestora y el Equipo de trabajo de la Hermandad. Proyectos que inciden en reavivar los lazos de fraternidad, en el servicio de la caridad y en el capítulo de restauraciones del patrimonio.
Terminamos con un apartado de ruegos y preguntas que nos dejó a todos un sabor agradable:
Hoy comienza una nueva era en la vida de la Hermandad del Calvario.
Hoy se han delineado las claves para la construcción una Hermandad renovada en la que todos podamos sentirnos realmente en casa y buscar, unidos, y sin protagonismos, caminos para vivir la fraternidad cristiana.
¡Alabado sea Dios en el Santísimo Cristo del Calvario, la Santísima Virgen de los Dolores y María Santísima de la Amargura!