La Hermandad del Calvario celebró en el día de ayer, sábado, 14 de enero, una Jornada de convivencia que hará historia en la vida de esta centenaria Cofradía.
A lo largo de todo el día, más de trescientas personas desfilaron por las instalaciones del antiguo Centro Reto y degustaron las migas con las que Domingo deleitó nuestros paladares.
Fueron muchas horas de departir con unos y otros: con miembros de la Cofradía del Calvario, con hermanos procedentes de otras Cofradías de Mérida, con personas de todas las edades y condiciones, saboreando el sentimiento de saberse miembros de la misma familia y de la misma historia. Una familia de todos y para todos: la gran familia de la Iglesia, de la cual, gozosamente, esta Hermandad se siente parte.
Desde aquí felicitamos a la Comisión Gestora y al Equipo de Trabajo de la Hermandad por la labor realizada en pro de la armonía y de la fraternidad.
Gracias a todos los que lo han hecho posible, que son muchos.
Gracias a todos los que, día a día, aportan su grano de arena para que la Hermandad del Calvario camine por sendas que abren caminos de futuro y de evangelio.
Sendas que, para nuestra querida Hermandad, apuntan directamente a la esperanza. Porque lo posible empieza a ser realidad. Porque la fraternidad no es solo un sueño. Porque el trabajo unido de muchos hace grande a esta Cofradía que es, por derecho y por historia, grande.
¡Nos vemos en la próxima!